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Historia de la Biblioteca Popular William C. Morris

William Case Morris (Soham, Inglaterra, 16 de febrero de 1864 - †Soham, Inglaterra,  15 de septiembre de 1932) fue un pedagogo, pastor anglicano, educador, filántropo y fundador de Las Escuelas e Institutos Filantrópicos Argentinos, en Buenos Aires.
Llegó a administrar 32 propiedades educativas y recorría puerta en puerta con su pequeña valija de cuero solicitando donaciones a su causa, contando así con más de 250.000 alumnos en sus registros oficiales (se estiman 50 mil mas en registros extraoficiales) educados por este gran filántropo.
De padres ingleses, su padre, de condición humilde, era predicador no afiliado a la iglesia oficial inglesa. Su madre falleció cuando el pequeño William tenía apenas cuatro años.
William Morris emigro a Itapé, Paraguay con sus sus dos hermanos, su hermana y su padre en 1872 en un emprendimiento de colonos. Debido a que la empresa que los había traído y contratado se desintegró ni bien llegaron, la familia Morris decidió moverse hacia el sur afincándose en una zona rural en la provincia de Santa Fe, Argentina en 1873. Aquí, las penurias económicas agobiaban a los Morris. William, que de pequeño demostraba su interés por la lectura apenas si tenía tiempo para dedicarse a ella ya que debió trabajar como granjero cuidando ganado y luego como empleado doméstico al servicio de un médico adinerado. Allí recibía mal trato y un día, exasperado por la necesidad, robo unas monedas para comprar salame y al descubrir el patrón la acción lo dejó en la calle.
Por vivir en la campaña, las migraciones constantes y la pobreza, su educación escolar fue deficiente, curso estudios hasta tercer grado y a pesar de la escasa educación formal el joven Morris procuro aprovechar las posibilidades que le ofrecían las bibliotecas donde fue viviendo y leyendo por las noches, para formarse solo o como dicen los ingleses "a self made man" (un hombre hecho por sí mismo).

William Case Morris
1864 - 1932
"Hoy alumnos quisiera hablarles de la Patria, y yo se que hablo de la Patria a pesar de ser ingles pero me siento tan Argentino como ustedes, y es así que ustedes tuvieron la suerte de nacer en este gran país, yo en cambio la suerte de poder elegirlo como mi patria de adopción de la cual tenemos que cuidar y fortalecer con el estudio."

Inicios de la Gran Obra

Chicos esperando recibir zapatos, ropa y elementos de escritura, todo provisto de la Biblioteca Popular para ingresar formalmente como alumno regular de William C. Morris

Ya adulto y con 22 años de edad William Morris se dirigió a Buenos Aires en 1886 instalándose en la zona del puerto de La Boca donde trabajó como pintor de barcos y empleado en una oficina. Allí, en "La Boca" en lo que William Morris describió como "el peor barrio de Buenos Aires" comenzó a congregarse en la Iglesia Metodista local. La Boca por ese entonces era un conglomerado plagado de conventillos, inmigrantes pobres, desilusionados y de niños que no tenían más perspectiva que la de mayor pobreza, promiscuidad y delincuencia. Este cuadro de terrible indigencia movilizó a Morris que vio en La Boca un futuro de condenados sociales y excluidos. Ese impacto movió su vocación cristiana en favor de la infancia abandonada que lo convertiría en maestro y guía de niños y jóvenes. Con el poco dinero con que contaba en 1888 alquiló un pequeño y descuidado conventillo para abrir un humilde comedor para los niños de la calle. En ese mismo lugar abrió una escuela dominical de la que se ocupaba personalmente costeando de su bolsillo el salario de un joven maestro durante la semana y encargándose él mismo de la instrucción religiosa los días domingos. Los niños recibirían "pan para el cuerpo y el alma".

En 1889 fue aceptado como predicador local por la Iglesia Metodista de La Boca, con lo que la actividad del joven misionero laico ganó mayor autoridad en el barrio de La Boca. En ese mismo año se casa con una joven inglesa, Cecilia Kate O´Higgins, quien había llegado al país con el pastor Stockton. Cecilia compartía con William Morris el destino de haber quedado huérfana de madre a los pocos años de vida. Al poco tiempo de casarse, tuvieron un hijo que falleció a los pocos meses.. Esta trágica experiencia parece haber impulsado al matrimonio a consagrarse por completo volcando sus energías al servicios de miles de niños. Su obra fue encuadrada rápidamente dentro del marco de la Iglesia Metodista, de la cual Morris era predicador y miembro: éste es el origen de la Misión Metodista de la Boca y el principio de su vida como filántropo.

Fundación de la Biblioteca Popular y continuación de la Gran Obra

En algún momento entre 1895 y 1897 Morris viajó a Inglaterra para obtener fondos para su misión. Durante ese viaje entabló contacto con la South American Missionary Society, una sociedad misionera anglicana que se ofreció a solventar parte de los gastos de una misión educativa y de la cual se convirtió en agente. A su vuelta a la Argentina, Morris abandonó la Iglesia Metodista y fue ordenado pastor de la Iglesia Anglicana por su primer obispo para América del Sur, Waite Stirling. El 27 de Junio de 1899 fundó en el barrio de Palermo, en la que zona que era conocida por el nombre de "Tierra del Fuego", a causa de su lejanía de lo entonces considerado civilizado, la capilla anglicana de San Pablo y comenzó una labor misionera constante, que incluyó visitas al cercano penal de Palermo para predicar a los presos, grupos de colaboradores que visitaban las casas de los vecinos más necesitados, distribución gratuita de Biblias, además de grupos de oración y de discusión de temas religiosos. En 1898 alquiló una casa en la esquina de Uriarte y Güemes e inició la primera de las Escuelas Evangélicas Argentinas, con un grupo de niños a los que encontró vagando por el barrio. En 1899, el número de educandos se multiplicó y eran más de cien los alumnos. Además abrió una escuela para mujeres, y más tarde otra Escuela en Maldonado. En 1904, las "Escuelas Evangélicas Argentinas", tenían una inscripción de 3.700 alumnos. Ya empleaban a egresados y se repartían libros, ropa y calzado además de asistencia médica. Morris ya administraba tres escuelas de varones, dos de niñas, una guardería infantil, un jardín de infantes de ambos sexos, un instituto de telegrafía, un instituto de escritura mecánica, un instituto de corte y confección , un taller de labores domésticas, un instituto industrial, un taller de artes y oficios además de dos escuelas nocturnas.
William C. Morris ya tenía toda un institución forjada pero se enfrentaba a un gran inconveniente: ¿donde guardar toda la sabiduría que iba a necesitar para futuras generaciones de alumnos?. El 5 de Noviembre de 1907 se decide fundar en la esquina de Guemes y Uriarte la Asociación de Ex alumnos y Biblioteca de las Escuelas e Institutos Filantrópicos Argentinos "William C. Morris". Este sería el lugar donde se almacenarían todos los libros para el dictado de clases, se reunirían alumnos y ex alumnos para compartir sus experiencias o conocimientos y se convertiría en la usina que impulsaría a el resto de los establecimientos llegando así en 1910 a ser el establecimiento más importante para William C Morris en donde el realizaría todos sus actos y donde pasaría mas tiempo.
En 1913 los beneficios de la obra llegaban a más de 5.000 niños y año a año fue incrementando la cantidad de alumnos y propiedades educativas. El 29 de mayo de 1925 fundó el "Hogar El Alba" para niños huérfanos y desamparados.

En 1932 (plena "Década Infame"), el subsidio junto a las donaciones descendieron y los gastos crecieron. La salud de William C Morris declinó y su enfermedad crecía. El 15 de setiembre del mismo año, falleció en su pueblo natal de Soham, a donde había ido de visita en busca de fondos para su causa. A la muerte de Nuestro Benefactor y Fundador Don William Case Morris, sus alumnos adultos ya graduados tomaron la posta en la administración de la Asociación y de la Biblioteca para hacerla perdurar en el tiempo en memoria de su fundador formando así Comisiones Directivas de generación en generación de sus alumnos y sus hijos. Estos no lograron contener y solventar todas las propiedades que administraba Morris y es así que la mayoría de las mismas pasaron a manos de Estado y del Consejo de Educación. La Comisión Directiva prosiguió solo con la administración de la Biblioteca y con el paso de la Historia Argentina este lazo de sangre que poseían las Comisiones Directivas de alumnos de Morris se fueron perdiendo poco a poco pero lo importante es que su espiritu e ideales de Don William Case Morris y de su alumnos siguen presentes hasta hoy en día.

A partir de la década de 1980 Nuestra Institución se vio envuelta en profundas crisis económicas por falta de subsidios. No obstante algunos alumnos de William Morris referentes de esa época (entre ellos Eugenio Escapa, Guillermo Cattolica, Guillermo Bianchi, Alejandro Zabala, Raul Cossio, Angel Carbone entre otros) con el mismo altruismo de su fundadores trataron de seguir brindando los servicios de la Biblioteca a los usuarios del Barrio de Palermo con pocos a casi nada de recursos económicos por falta de subsidios pero llego un momento en que vieron la necesidad de cerrar las puertas y cesar las actividades socio culturales restringiendo al mínimo todo funcionamiento o servicio que venían brindando.

Nuestro referente actual

Eugenio Escapa nació en 1932, herrero y carpintero por naturaleza además de gran administrador llegó a ocupar el puesto de Presidente de la Comisión Directiva de nuestra Institución. Amante de la Biblioteca inició un proceso de construcción y restauración del inmueble con el presupuesto que disponía de su propio bolsillo. Llegó a transformar, construir y restaurar todas la estanterías de libros que posee actualmente la Biblioteca. Incansable trabajador gesto y propuso el mas ambicioso plan que haya realizado la Biblioteca actualmente en materia de infraestructura: un entrepiso. A simple lectura parece la idea mas sencilla pero en ese entonces la Biblioteca no contaba con los materiales y el presupuesto necesario. Es así que de su propio bolsillo y a base de su propio conocimiento, experiencia, arte y pericia llevó adelante tamaño proyecto. Su sacrifico fue arduo, solía levantarse preocupado a la madrugada en su casa e ir a la Biblioteca para verificar que todo siga en su normal cauce y que nada se haya desmoronado. La recompensa fue inmensa: La Biblioteca duplicó su espacio físico para colocar libros y permitió tener un pequeño depósito a disposición de la Biblioteca.

Eugenio Escapa
1932 - 2005

A la muerte de Eugenio Escapa en 2005 (por entonces Presidente de la Institución) La Comisión Directiva y los Socios de la Institución confundidos por la realidad imperante resolvieron hacer una Consulta a todos los socios y vecinos del Barrio de Palermo sobre la continuidad de la Institución. En ese orden de cosas resolvieron convocar a una Asamblea General Ordinaria con el fin de encontrar una salida a la acefalía de algunos puestos claves de la Comisión Directiva. En la Asamblea llevada a cabo resultó electa La Hermana María Rosa Reynoso de la Congregación de Las Hermanas Misioneras de la Virgen Milagrosa quien con su propio personal del Colegio San Ambrosio el cual preside abrió las puertas e hizo la limpieza y restauración del inmueble y muebles de la Institución. Inició todos los trámites y contactos con instituciones como CONABIP, Dirección General del Libro y Federación de Bibliotecas Populares para conseguir los fondos necesarios para nuevamente brindar los servicios socio-culturales.